Crónica: un fin de semana en la montañosa Matagalpa

Faustino Salcedo | Jun 25, 2012

El agua cristalina de una cascada caía sobre un río de un aspecto no tan limpio, a 147 kilómetros de Managua y a 15 kilómetros de la montañosa, fría y siempre visitada Matagalpa, ciudad en la que se estaba realizando la “Cavana Turística” de la zona centro de Nicaragua (Boaco, Chontales y Río San Juan) el sábado 23 de Junio, evento que se extendendería hasta el domingo 24. Mientras el agua de esa cascada seguía su curso, surgía el primer elemento para esta crónica, en la que también habrá datos sobre el ambiente de la caravana turística y sobre una finca agroturística.

La cascada en cuestión es parte del centro ecoturístico Cascada Blanca, en la comunidad de Santa Emilia en Matagalpa, carretera hacia el municpio de La Dalia. Ahí fue el primer lugar visitado en una pequeña gira por esta ciudad del Norte, organizada para periodistas turísticos por el Instituto Nicaragüense de Turismo (INTUR). Luego de hacer un recorrido hasta el lugar donde se observa la caída de agua, además de caminar por detrás de ésta hasta llegar a una cueva, los encargados del lugar esperan a los visitantes con una taza de café cosechado en la zona, reconocido internacionalmente por su gran calidad.

Una vez finalizada la visita a la cascada, tocó tomar el camino hacia la ciudad de Matagalpa, donde ya estaba activa la “Caravana Turística” en el parque Darío. Ésta era una feria turística en la que 61 empresarios del ramo, artesanos y artistas de Boaco, Chontales y Río San Juan, expusieron sus productos al público norteño. Fue la segunda vez que la zona centro se convirtió en protagonista de este tipo de eventos, la primera vez fue en Managua en el mes de Mayo de este año.

Durante estas ferias el público visita los toldos expositores, disfruta de la comida, y luego observa los actos culturales, que por lo general son de bailes y cantos característcos de la zona que expone. Sin embargo, esta vez lo cutural no fue lo más llamativo, puesto que lo observado fue bailes de otras regiones del país como el Pácífico y el Caribe. Al menos el día sábado no se puedo observar la cultura vaquera de Boaco y Chontales en sus actos culturales, y menos la cultura ribereña de Río San Juan.

En cuanto a la afluencia de personas y visitas a los toldos, los expositores se mostraron contentos, como la señora Anielka Galeano, representante de las “Quesilleras” de Santo Tomás, municipio de Chontales, quien mostraba cara de felicidad después de contar que vendió 250 quesillos en tres horas. Al departamento de Chontales se le conoce por su actividad ganadera, por lo que se dice que sus “ríos son leche y sus piedras de cuajadas”. Frente al toldo de los quesillos, estaba el de Juana Peña, de la ciudad de San Carlos (Río San Juan) ofreciendo su sopa de pescado, cuyo olor podía sentirse desde lejos.

En el evento no todo se trataba de la gastronomía, también la gente se acordó de visitar a los artesanos. Tal es el caso de Estela García, artesana de Río San Juan, que con las expresiones de su cara refelajaba su descontento con las ferias anteriores en las que no le había ido muy bien, sin embargo, en esta ocasión logró atraer más clientes a su negocio.

Nubia Aguilar, una señora de al menos 40 años que llegó como visitante al evento acompañada de su hijo menor, contó que le llamó la atención conocer sobre Río San Juan y ahora tenía muchas más ganas de visitar la zona. Ella pasaba por el lugar y sintió la curiosidad de conocer sobre la cultura de la zona central del país.

El sol llegó a su ocaso y con él se llevó el primer día de Caravana Turística, sin embargo, la gira por Matagalpa continuó el domingo 23. Dejamos atrás lo que ocurrió en el Parque Darío, para visitar la Finca Agroturística La Canavalia (en la comunidad Hilapo de San Ramón), lugar en el que se realizó un recorrido improvisado por la granja avícola donde se observan a 5,000 gallinas ponedoras, divididas en 4 galeras, de las que se sacan 86 cajillas de huevos diarias, y una pequeña laguna que sirve para que el ganado llegue a tomar agua.

En La Canavalia se pudo sentir un ambiente rural combinado con aventura y malos modales por parte del guía improvisado, quien aseguró actuar de tal forma porque estaba en sus horas laborales y debíamos hacer el recorrido rápido. La velocidad con la que fuimos dirigidos no evitó el abordaje a una pequeña balsa de plástico en la que llegué hasta el centro del la laguna, con dificultad por la falta de coordinación con la que remabamos los dos ocupantes, lo que hacía que la balsa girara, problemas técnicos que fueron superados luego de un momento.

El viaje por la montañosa región del Norte llegó a su fin, pero las activades en la ciudad continuaban. Con el segundo día de la “Caravana Turística” a punto de empezar en la ciudad, nosotros emprendimos el viaje de regreso a nuestras casas, y Matagalpa quedó con la presentación de la revista cultural de Boaco.

En el siguiente enlace puede ver nuestra galería de imágenes de la Caravana Turìstica: Galería.